La línea de investigación en juguetes inteligentes, es una de las más prometedoras del panorama científico y tecnológico actual.
Pensemos por un momento en las posibilidades que ofrecen robots dotados de inteligencia artificial y capaces de detectar emociones; podrían acompañar a personas mayores solas, ser compañeros de juegos a edades tempranas, ayudar a aprender idiomas en las aulas o asistir a personas con TEA en su vida diaria.
Por todo ello, en este primer taller de toma de contacto, comenzamos un proyecto a largo plazo en el que ha participado en distintas fases todo el alumnado.
En este sentido, los más pequeños han construido un dragón chino con cajas de cartón, un mantel de papel y trozos de papel charol.
Ya traía programado un juguete inteligente básico en un tablet, de manera que le pusieron unos ojos animados capaces de detectar movimientos y emitir sonidos con Scratch, basado en el gato de Cheshire de Alicia en el País de las Maravillas.
Después hicimos un desfile y jugamos unos minutos libremente.
Los mayores, en cambio, han programado con Scratch para Arduino un juguete inteligente propio, para ponérselo al dragón.
Para ello, se han iniciado en dos nuevos programas; Fireworks 4, que edita y modifica los gifs animados, y Audacity, que edita sonidos y les añade efectos.
Para animar los ojos del juguete, es necesario importar como disfraces cada uno de los fotogramas del gif animado y hacer un programa como el que se muestra.
El programa contiene una serie de estructuras de control de flujo interesantes, como bucles anidados y condiciones, además de un comparador que nos hace reflexionar sobre el concepto de división.
Así, en informática, el módulo de un número (mod) es el resto que nos queda al dividirlo por otro. De esta manera, si queremos que el juguete parpadée cada 5 segundos, redondeamos el segundo actual del sistema, lo dividimos entre 5 y comparamos el resto de dicha división.
Si el resto es cero, el tiempo será múltiplo de 5 segundos y desencadenamos un cambio de disfraces muy rápido que da la sensación de parpadeo.
Algunos se animaron a introducir otros objetos Arduino en su sketch, moverlos, imaginamos sensores que podemos ponerle, etc.
Seguiremos diseñando y mejorando nuestro juguete a lo largo de próximos talleres.